A Nelly Acevedo González
Nuestro amor,
Maestro equilibrista
Que caminó sonámbulo
Al borde del abismo.
Que dependió
De una gota de rocío.
De la promesa de un filibustero.
Que fue payaso,
Saltimbanqui,
Poeta y maromero.
Que fue asaltado en una zona sórdida
Y se jugó su suerte en un lance de espadas.
Que nunca tuvo ojeras
Porque no conoció la madrugada.
Que no tuvo mañana,
Y miró con asombro cada nuevo día.
Que escribía epitafios y moría
En cada despedida,
En cada lágrima,
En cada hoja caída,
Nuestro amor
Guerrero fatigado
Que recibió su cáliz de amargura
Y espera desolado
La muerte que le resta,
¡La más dura!
...
Sobre el autor:
Mi nombre es Ricardo García Madariaga. Nací en Barrancabermeja, en 1943. Terminé estudios de bachillerato en el colegio Diego Hernández de Gallegos, de esta ciudad. A los 23 años viajé a Bogotá donde me gradué como Administrador Público. Estuve dos años en Francia, estudiando temas relacionados con la gerencia pública. Mi actividad laboral se desarrolló en varias universides de Bogotá, como docente, consultor, y administrador académico.He escrito artículos, ponencias y libros técnicos sobre temas administrativos. Soy casado y tengo cuatro hijos. Aunque he escrito numerosos poemas, nunca he pretendido publicarlos salvo algunos que publiqué en el periódico local en mis años de estudiante de bachillerato.
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